GORILAS EN LA NIEBLA

Así se le quedó la zona de la cola a Toñín, escarchada como la fruta

 Después de una semana de nieblas cerradas, el viernes por la tarde nos dio un respiro y la mini grupeta invernal salió desde la bodega a las cuatro en punto. Como tenía tiempo y había comido temprano, me adelanté una hora para poco a poco ir sumando kilómetros a esta pretemporada que de momento es un poco piltrafilla.

Casi es mejor ni mirar las notas del año pasado por estas fechas, porque a estas alturas ya habíamos hecho salidas de 130-150 kilómetros, cuando este año yo casi ni me he acercado a las tres cifras. Claro, la motivación no es la misma, probablemente los objetivos serán otros, y además la lesión muscular está marcando ambas cosas. Hasta que no me recupere por completo, y viendo cuándo lo hago, no podré fijar plazos ni pruebas a las que acudir. Ni de qué forma hacerlo, porque sí es cierto que estoy inscrito en un par de triatlones a finales de abril y mediados de mayo, pero dependiendo de cómo pueda rendir para entonces iré con una mentalidad u otra.

Los gorilas en la niebla del título del post

He empezado a trotar de nuevo, con mucho cuidado, despacio y estirando bien tras las sesiones. He cambiado las zapatillas por otras más pesadas pero con mucha más amortiguación, y noto que la cadera se me carga menos con los impactos. Tampoco estoy corriendo por asfalto de momento, básicamente caminos de concentración y cinta, mucha cinta. Que agradezco, porque mientras ves la tele y con el frío fuera, tampoco es tan aburrido. Y esta semana intentaré retomar mis sesiones de piscina, porque entre que es lo más flojo que llevo, que hace falta mucha motivación para echarte al agua, y que las molestias continúan al dar la patada de crol, casi no me mojo desde finales de diciembre, y las dos o tres veces que he ido para que no se me olvide el camino he visto cómo la natación es incluso más desagradecida que otros deportes de fondo, como la dejes un par de semanas, vuelta a empezar de cero (como Ian Thorpe).

El mar de nubes... donde vivimos

El domingo amaneció entre brumas y a dos bajo cero. Típico día para volverte a la cama, arrebujarte y a tomar vientos. Eso si tienes todo en tu sitio, si te falta un hervorcillo te pones siete capas de ropa, agarras la bici y al prau, a encontrarte con otros como tú. Sin calificativos el gran Carlos, súper Toñín, Txontxo el indomable y como no, la mitad buena del dúo corcho pan, que para que no cupieran dudas accedió a quedar conmigo media hora antes “para calentar”. Enfilamos hacia Cáseda con la esperanza de que abriera un poco, y el que se abrió fue Alfonso, que en el alto vio que quedan muchos días y casi todos mejores, no vale la pena cuando se está justo encabezonarse. Con idea de ir hacia Mamillas por primera vez en el año cambiamos justo a tiempo al recordar que la bajada entre pinos de ese puerto seguramente estará helada y no vale la pena jugársela. Así que seguimos hasta Castilliscar, ahora sí con un sol espléndido. En el pueblo olor a almuerzo de cazador, nos avituallamos un poco en marcha, y tiramos hacia Sos. Toñín, de natural inquieto, desata hostilidades, y aunque pasamos de él, el ritmo aumenta de manera gradual hasta que le cogemos antes de las últimas curvas. Mike va como un becerrico, Carlos responde a mi modo de ver mejor que el año pasado por estas fechas, y yo me pego un calentón inútil a estas alturas, en pleno proceso de recuperación y que me deja en la realidad de mi situación de un plumazo. Madre mía lo que me queda!!

Sin pensarlo, hacia el frío

A medida que vamos bajando entramos de nuevo en territorio niebla, y frío, y hielo. En Sos ya no sentimos los pies, así que tras ser prudentes en la bajada nos ponemos a relevos cortos durante toda la recta para entrar en calor, o al menos, no congelarnos. No hay fotos, la movilidad en las manos era muy limitada, pero Carlos parecía Amundsen, a Toñín se le ha helado la cola y a Mike sólo se le veían los ojos debajo de las dos bufandas que lleva. En el cruce de Gabarderal decido que ni Liédena ni leches, me voy a mi casa a estirar al lado de la estufa. Saliendo un día como hoy ha quedado claro que la temporada se da por empezada.

Alberto 4C

P.D. Antes de colgar el post me meto en la página de la Qh 12, a las 13H. era el sorteo. Parece que el 23 de Junio ya tenemos algo que hacer. No, si el cupón no nos tocará, pero tonterías de éstas… Qué follón!!!