EL RINCÓN DE MIKE Y ALBERTO

No es difícil que dos amigos tengan aficiones comunes, en parte de ahí puede venir la amistad. Pero sí es más complicado que la afición común les envenene a los dos de la misma forma y con la misma intensidad. Eso es lo que nos pasó a nosotros con la bicicleta. Empezamos juntos, fuimos aprendiendo, mejoramos, nos planteamos nuevos retos, y llegó un momento que uno decía :“pues podíamos este domingo ir a…” y el otro decía “pues no faltaba más”, y nos íbamos a hacer la vuelta de las Abaurreas. Y volvíamos de dar una vuelta con el club y uno decía: “pues podíamos alargar un poco” y el otro decía “pues no faltaba más”, y caían otro par de horas y llegábamos de noche a casa.
Salimos con la Btt, últimamente salimos mucho con la de carretera, y espérate que no terminemos saliendo en tándem, o haciendo duatlones, o vete tú a saber. Éste año estamos preparando varias cosas, algunas juntos, otras no, y en este rinconcito queremos contaros los momentos buenos, los menos buenos, las chorradicas, la épica de la bici, las globeradas y lo que se nos pase por la cabeza y se pueda contar. Va por ustedes!!

sábado, 27 de abril de 2013

INCERTIDUMBRE...

Tenía verdaderas dudas de cómo me encontraría después de un duro invierno entrenando duro. No me había medido todavía en una prueba cicloturista, y este fin de semana, era el día.
La Monlora 2013. Es una prueba corta, eléctrica, nerviosa que te pone a prueba y te empieza a dar esa chispilla que tanto nos gusta.
115 kms, para 700 cicloturistas.
La hice en 2011, e hice muy buen papel, llegué el 59 con 3h12m, el 27 de mi categoría. Ese año, estaba a un nivel bueno y eran mis números de referencia.
Llegó el día. Quedé con dos compis y fuimos para allá. Parece que íbamos a tener buen día, pero un poco ventoso.

Listos en la salida, la estrategía la tenía clara. Colocarme por delante en el grupo para poder aguantar el tirón de la salida. En ligera subida, esos tres primeros kms ponen tu corazón a prueba. Si aguanto, colocarme escondido del aire en contra que íbamos a tener hasta Ayerbe. La otra vez, pequé de inocente, me corté y la cagué. Darlo todo en Sta Eulalia, un puerto de 8-9 kms, para poder bajar en grupo, hasta Luna y hacer lo que pueda en la última subida al Monasterio de Monlora.

Es una distancia que manejo bien, la hago en casi todas mis salidas y tengo confianza.

Se da la salida, y ocupo una buena posición, neutralizados al principio, se suelta el grupo y empiezan los escarceos. Unos frenazos por aquí, unos empujones por allá, miradas desafiantes y, llega el giro de derechas donde empezamos lo serio.
Bien colocado por el interior, como a mi me gusta, sentado y a plato, me pongo al lío.
Voy genial, aguanto bien y las pulsaciones no suben más de 170ppm. Me gusto, el día anterior me había probado un poco las piernas y tenían ganas de marcha.
A limpio tiron, 45-50km/h, 160ppm, pero agusto.
Llegamos al giro donde el aire va a cambiar y no quiero colocarme mal.
Damos la curva y el grupo se pone en fila de a 1. Lo paso mal, la verdad, pero pronto nos agrupamos y me relajo un poco.
Seguimos a limpio tirón y el aire castiga. Viene de derechas, fuerte, pero me escondo por la izquierda de la calzada y bien agachado. Voy bien colocado y veo los demarrajes. Me divierto. Joder!, te sientes ciclista.
Llegando a Ayerbe, mis muslos me avisan un par de veces, la falta de ritmo se nota.

Bajamos hacia Sta Eulalia muy deprisa, pero no hay miedo.

Afrontamos las primeras rampas, hay nervios, se hace un grupo con los master de unos 40 ciclistas. Me da respeto ir con ellos, no se si será mi sitio, los Tamayo, Chentín, Remón, David García, Luciano, vamos que son gente que anda mucho.
Entre pensarlo y no pensarlo, me sacan unos metros insalvables.
Empiezan los demarrajes y van abriendo hueco. Los tengo a la vista toda la subida pero ya subo a ritmo.
Voy recogiendo descolgados del grupo cabecero, no me aguantan. Un Beton me ayuda con la subida. 165-170ppm, con 90-95rpm. Vamos genial.
Al final arriba me sacan un par de minutos. Me arrepiento de no haber intentado aguantarles. ¿Falta de confianza?, puede. Aprenderemos de esto.

Bajamos hacia Luna, terreno favorable. Somos un grupo de 6, y a relevos, intentamos coger al grupo. Poco a poco los relevos van bajando, hasta reducirse a uno de Zaragoza y yo mismo. Voy el más fuerte de los 6, pero poco puedo hacer.

Casi en Luna, nos coge un grupo de unos 60 ciclistas, me escondo un poco para descansar y comer algo.
Me conozco la llegada y llegando a Luna, me coloco de los primeros me gusta tomar la curva hacia Monlora delante para evitar peligros.
Nos traen los Zarabici a toda velocidad y ahí se retiran para que otros del mismo equipo coronen en Monlora.
Como veo por donde van me pongo a su rueda y a ver que tal. Vamos subiendo y el ritmo es cansino.
Calculo un poco la distancia y me pongo el primero, subo el ritmo y lo doy todo. El grupo se rompe y ya sólo me aguantan 4 ó 5.
Al llegar a un trozo de carretera con cemento, la inclinación baja y es la señal para bajar coronas, ponerse de pie y vaciarse. Dicho y hecho, llego solo, a 182ppm, primera vez este año, con 3h:06min, el 46 en la absoluta, 15 en mi categoría y a 9 minutos del primero.
Muy contento.

Espero no haberos aburrido.
La próxima, La ROMPEPIERNAS de SOS.
Mucho respeto el año pasado reventé y este año veremos.
180 kms.
Un saludo,
Miguel.

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